::: aLaS RoTaS :::

PoR tIeMpO iNdEfInIdO, hAsTa QuE cUrEn,
HaStA qUe PuEdAn AbRiRsE dE nUeVo,
SiN tEmOr A lA cAíDa,
SiN tEmOr A lAs HeRiDaS,
cIeRrO mIs AlAs, LaS aTo De NuEvO,
cAlLo Mi BoCa, GuArDo Mi VoZ,
mIs PeNsAmIeNtOs, Mi CoRaZóN...

εїз kat εїз

Identidades II

El verano casi terminaba, lo notaba en el viento y se lamentaba . . . sentada en aquella banca, esperaba como un condenado a muerte, ya sin esperanzas solo el golpe final.

No sabía mucho de él, pero lo conocía, sabía de su gran corazón, de su alma perdida y su confusión existencial. Lo amaba talvez como nunca lo haría otra vez, con ese amor desinteresado que no espera nada a cambio, que no pide más de lo que voluntariamente se le da, que no exige.

Por que lo conocía y por que lo amaba sabía que esta tarde sería diferente, no caminarían por las calles de siempre, ni tampoco irían a pasar la tarde en su casa, sabía que hoy lo que sucediera pasaría en aquella banca, donde ahora lo esperaba.

Al llegar se disculpó por la tardanza, ella no le dio importancia no tenía prisa alguna, lo miró y en sus ojos descubrió que tal vez era más difícil para el que para ella aquel último momento. Le explicó que no podía más alargar su espera, ella alegó que no se estaba quejando, el insistió en que no podía más. Dijo que no era justo, que lo mejor era continuar cada quien en su camino. Ella decidió no alegar más y solo pregunto como era su costumbre si estaba seguro. El asintió y así se acabó.

De vuelta a casa en el bus, notó algo extraño, no estaba triste ni tenía ganas de llorar, solo sentía una gran nada que no la dejaba respirar,de repente descubrió la causa, que distraida pensó, traía el corazón en las manos. El se lo había arrancado tan limpiamente y con tanta suavidad que no lo notó, que parecía más un acto de amor que un irremediable adiós. Fue cuando comprendió que Camila nunca dejaría de quererlo, y decidió que era hora de dejarla y dejarlo.

Por varios días se preguntó ¿quien debería ser ahora?, y concluyó que lo mejor era ser todo lo opuesto hasta el momento, estaba cansada de su buena disposición y confianza así que se recetó así misma algo de malicia y seriedad cosas que ella creía le ayudarían a ir mejor por el mundo. Pero el cambió, como siempre en ella, se dio de forma natural, su nuevo habitad la consumió convirtiéndola en alguien que aun extraña por las noches, alguien que no planeó dejar de ser . . . pero esa ya es otra historia.

Un día bastante lejano descubrió que su estrategia para dejar de quererlo había fallado, es cierto era otra, y tenia otro nombre pero . . . aun lo amaba, lo único que había conseguido al hacer todo este artificio era cambiarle también de nombre a su amor ... lo malo es que nunca pudo descubrir cual era ese nombre ¿amistad? ¿amor filial? . . . al tiempo desistió de ponerle alguna etiqueta a ese amor que sabía nunca dejaría de sentir y que en los peores momentos de su vida la ayudó a no morir.

εїз kat εїз